Examen Optométrico

 

Lo realiza el Óptico-Optometrista y consiste en el estudio del funcionamiento del sistema visual, acomodación, vergencias, estereópsis, visión periférica, movimientos oculares, memoria y percepción visual, entre otras habilidades visuales.

 

¿Qué es la Optometría?

 

La Optometría es una disciplina científica que previene, detecta y soluciona problemas visuales, centrando su objetivo en conseguir el máximo rendimiento visual con la mínima fatiga.

 

 

Tener un 100% de vista no implica tener buena visión.

 

La Visión es un conjunto de habilidades que sirven para identificar, interpretar y comprender lo que vemos. El oftalmólogo evalúa la vista y las patologías oculares; y el buen Óptico-Optometrista evalúa la visión.

Se nace con vista, pero no con visión. La vista nos permite ver el coche, pero la visión es la que nos permite predecir su velocidad y dirección.

No somos conscientes de toda la información que nuestro sistema visual nos proporciona sobre el mundo que nos rodea. De hecho, el 80% de la información que recibe nuestro cerebro le llega por los ojos.

El sentido de la vista tiene una gran importancia en el desarrollo y aprendizaje del alumno. Por ello insistimos en la necesidad de realizar revisiones periódicas de la visión, sobre todo en la etapa de escolarización, ya que los resultados académicos están íntimamente ligados a la visión y las destrezas visuales.

También es necesario incidir en los cambios de hábitos en la población infantil y adolescente, que sustituyen las horas de juego al aire libre por las nuevas tecnologías (móviles, ordenadores, tablets), lo que está haciendo aumentar el número de jóvenes que sufren problemas visuales.

 

 

¿Por qué es importante realizar un Examen Visual?

 

Gracias a la realización de un examen visual optométrico, podemos detectar los diferentes problemas visuales, además de cuál sería la solución más óptima para cada paciente.

Los defectos refractivos más comunes son:

  1. Miopía. Las imágenes procedentes de infinito (5 metros o más), focalizan delante de retina, y como resultado produce visión borrosa de los objetos. El principal síntoma es la falta de nitidez al ver objetos lejanos como la pizarra o la televisión.
  2. Hipermetropía.  Las imágenes no son enfocadas en retina, si no por detrás de ella, lo que da lugar a visión borrosa, generalmente los objetos lejanos  se ven claramente, pero los cercanos se ven borrosos, aunque no siempre es así. El principal síntoma es la pérdida de nitidez en tareas cercanas y media distancia.
  3. Astigmatismo. Ocurre cuando la córnea no presenta la misma curvatura en todas sus zonas, lo que da lugar a imágenes borrosas y distorsionadas tanto en visión de cerca como de lejos. Este defecto refractivo puede ocurrir conjuntamente a la miopía o hipermetropía.
  4. Presbicia. Con la edad, el cristalino, que es el encargado de enfocar las imágenes, pierde flexibilidad, y por ello, se pierde la capacidad de ver nítido a todas las distancias. Su principal síntoma es la incapacidad de enfocar las imágenes en tareas de cerca como la lectura.

Además de estos 4 defectos refractivos, como ya hemos mencionado anteriormente, gracias al examen visual optométrico, podemos detectar otros muchos problemas asociados a la visión, como las disfunciones acomodativas,  los movimientos oculares no óptimos, pérdida de sensibilidad al contraste, visión en tres dimensiones disminuida

Se recomienda que todas las personas se realicen un Examen Visual una vez al año aproximadamente, con el fin de detectar cualquier anomalía lo antes posible y poner solución para que cada paciente obtenga la máxima calidad de visión, y de vida, posible.